Tres miembros de la Red Tragevic, Carolina Hamodi, Eugenio Actis Di Pasquale y Valentina Viego publicaron el capítulo "Nuevas normalidades laborales y domésticas durante la pandemia del Covid-19: análisis con perspectiva de género de los casos Argentina, Brasil, España y México" en el libro coordinado por J. R. Coca y B. García Gómez "Entre los límites del Sars-Cov2. Sociedad Comportamiento y retos futuros". Ed Serbal. Cátedra Caja Rural de Soria.
El capítulo estudia las percepciones sobre experiencias de las familias españolas, argentinas, brasileñas y mexicanas durante el periodo de confinamiento desde una perspectiva de género. En particular, se analizan: las rutinas de trabajo remunerado y las actividades doméstico-familiares (tareas domésticas, y cuidados de niños/as y de personas mayores).
El trabajo utiliza la base de datos de la Encuesta sobre rutinas laborales y Encuesta Iberoamericana sobre Rutinas Laborales y Cotidianas en tiempos del Covid-19 realizada por la Red TRAGEVIC. La capacidad de hacer trabajo remoto desde el hogar es mayor en mujeres que en hombres, a diferencia de las tendencias previas, por la extensión masiva del trabajo remoto a actividades de enseñanza, sector donde predomina el empleo femenino. Además, la capacidad de teletrabajo es relativamente mayor en personas que conviven con niños/as, tanto porque los jóvenes se insertan en trabajos más precarios como porque los de mayor edad tienen menos recursos o formación para asumir tareas laborales remotas. Esto pone de relieve la centralidad de la conciliación en el análisis de los factores que moldean los impactos del trabajo remoto.
Con respecto a las diferencias entre países, encontramos que en Argentina y España las actividades laborales se han dificultado más por la presencia de niños (frente a Brasil y México). Es justamente en estos países donde se aplicaron medidas de confinamiento más estrictas y donde las familias cuentan menos con ayuda del servicio doméstico.
Finalmente, en todos los países el confinamiento incrementó en gran medida la carga que suponen los cuidados de personas mayores. Pero en Latinoamérica es donde se observa una mayor carga, y principalmente por parte de las mujeres. Estas diferencias podrían atribuirse a que en España existen más políticas dirigidas a la atención de las personas dependientes, y que, culturalmente, suele ser más habitual que en Latinoamérica institucionalizar a las personas mayores para su cuidado.